Santas Conchas Café

Para este local comercial, se creó una versión del restaurante Santas Conchas que no solo mantuviera la esencia y la identidad de marca que ha caracterizado al restaurante desde sus inicios, sino que también respondiera a las solicitudes de los clientes, quienes deseaban un espacio adicional que ofreciera una atmósfera distinta.

Este nuevo concepto se inspira en la calidez y la comodidad de una cafetería, buscando que los visitantes se sientan como en casa, disfrutando de un ambiente relajado y acogedor. La idea era que, aunque se tratara de una extensión del restaurante, los clientes pudieran experimentar una sensación diferente, propicia para largas charlas acompañadas de un buen café o una merienda. Por esta razón, se optó por utilizar una paleta de colores cálidos en todo el proyecto.

La elección de tonos terracota, beige y marrones suaves se complementó con la utilización de materiales naturales como la madera, que no solo aporta un toque rústico y auténtico, sino que también contribuye a crear un entorno más amigable y cercano. Además, se prestó especial atención a la iluminación, eligiendo lámparas que emiten una luz suave y envolvente, capaz de transformar el espacio y hacerlo más acogedor, invitando a los clientes a quedarse un poco más, a disfrutar de su bebida favorita o a compartir un momento agradable con amigos y familiares.

La disposición del mobiliario también fue cuidadosamente planificada. Se incluyeron mesas y sillas de diferentes tamaños, permitiendo que tanto grupos grandes como parejas pudieran encontrar su lugar ideal. Algunas áreas cuentan con sillones cómodos, lo que añade un toque de informalidad y confort, mientras que otras se diseñaron para facilitar la interacción social.

En conjunto, todos estos elementos fueron seleccionados para crear un espacio que no solo sea funcional, sino que también invite a la relajación y al disfrute, manteniendo siempre la identidad de Santas Conchas, un lugar donde la buena comida y la buena compañía se encuentran en un entorno que se siente como un segundo hogar.